La llave no sé donde está,
pero cuando la encuentre
serás tú quien la tendrá.
Disparos, hartos del azar.
Solo a ti sí es regresar.
La razón no se calma,
solo sabe así jugar.
Entregarte la calma,
eso sí es el regalo,
no más por aceptarlo.
Contra marea se nada mejor.
Ábrete paso explorador,
No te pierdas nada por favor.
Aquí, allá, en tu interior.
Tuyo siempre son color.
Acelera, descansa, reposa con una manta.
Los cambios me acarician el alma.