domingo, 30 de diciembre de 2012

Ahógate.

Sangrar cada uno de nuestros recuerdos hasta el olvido, pasar página y retroceder infinitas veces por ver que tú sigues ahí, o al menos nuestros recuerdos.
Me siento repetitiva con una canción que no deja de sonar "IT NEVER ENDS"; Cada segundo, cada minuto... Cada TODO.
Nunca acaba.

Te daré una pista, empieza por 'Z', es lo que creo que eres ahora.
Cada llamada, cada palabra en falso que pronuncias para que siga ahí se ha esfumado, ¿No te das cuenta?. Cada intento por permanecer, 'unidas', o mejor dicho, por que yo permaneciese a la espera de tu señal está roto, no por mí, si no por ti misma.

Pretendiste construir un castillo de naipes sobre un corazón turbulento y fallaste; tuviste la oportunidad de crear un imperio y derruiste la puerta, pusiste un candado y lo tiraste al río.

Las heridas que dejaste nunca hubiesen sanado a menos que las hubiese desinfectado desde la raíz, eso hice y retazos de pus han quedado impregnados en lo más profundo de mi epidermis, intentan acercarse a las venas pero nunca podrán. Estuviste cerca de convertirme en un mero vasallo de tu ego, pero mis neuronas nunca dejarían embaucarse por alguien como tú, el corazón es débil,  pero la razón y el pensamiento son extremadamente poderosos.
Parecía que eras un licor exquisito, guardado en el rincón de la más oculta bodega. Yo iba a ser aquella persona capaz de degustar tu verdadera esencia, aunque me dí cuenta con el tiempo (aún no sé si un poco tarde o en el momento justo) de que el envoltorio poseía una doble capa. Más allá de encontrar ingredientes o algún tipo de palabras condescendientes vi tu verdadera fachada; veneno.
Quisiste embaucarme, corromperme y doblegarme, pero, aunque algunas gotas hubiesen caído en mis labios, nunca llegaste a penetrar lo suficiente, ni para llegar a conocer mi interior y mucho menos para saber la verdad.
No te lo hubieses esperado, el resto de respuestas que querías conseguir están encerradas en un baúl, dentro de un cajón de la lista infinita de neuronas que alberga mi ardua mente.

Ahógate; Tú.
Te me atragantas.