Paredes arañadas al abordaje
riéndose de lo que queda del traje.
Con la presión de las aficiones,
el dolor en los riñones.
Esperando que abran la puerta,
La que se cerró con la erronea tinta,
Las historias que nunca cuentan,
Y además lo que se intentan.
¿Acaso es eso el ingreso?
Medio dormida, insomne,
Cansada del teatro donde dormir,
Harta de toda falacia.
Una oleada de pensamientos difusos
El mío es el eterno que dibujo,
Cansado de incongruencias.